Cocktail Oyster Manzanilla (Brindis por el Movimiento 15 de Mayo)
Coktail Oyster Manzanilla
Ingredientes: (4 personas)
Cuatro ostras
Cuatro aceitunas
Un limón
Cuatro rodajas de pepino
Un vaso de Ginebra Bombay Shappire
Un vaso de Manzanilla
Elaboración:
En primer lugar abriremos y extraeremos las ostras de las conchas, las pondremos en un bowl y las reservaremos junto con su agua en el frigorífico para que estén bien frías. En ese momento llenaremos un vaso con hielo picado hasta arriba. Agregaremos la manzanilla bien fría, la ginebra y el agua de las ostras. Mezclaremos bien.
Como detalle clavaremos cada aceituna y una rodajita de pepino sin pelar en un palo de brocheta. Untaremos las copas con un trozo de la cáscara de limón para que sus aceites nos besen en cada trago. Introduciremos en cada copa una brocheta, un trocito de corteza de limón y una ostra.
Como detalle clavaremos cada aceituna y una rodajita de pepino sin pelar en un palo de brocheta. Untaremos las copas con un trozo de la cáscara de limón para que sus aceites nos besen en cada trago. Introduciremos en cada copa una brocheta, un trocito de corteza de limón y una ostra.
Con todos los elementos preparados esperando en la copa, verteremos el líquido del cocktail una vez colado sobre ellos.
Salut |
Justificación de la receta:
Paseaba este humilde charolastra por las calles de su barrio esta misma tarde cuando una visión mágica me ha sorprendido, e incluso alterado el ánimo, últimamente demasiado apaciguado. La postal que me ha conquistado, a la vez me ha provocado la necesidad de crear un trago nuevo para la ocasión. Uno nuevo, rompedor.
Zaragoza clama desde su corazón. Plaza del Pilar |
Ciudadanos ejerciendo la libre expresión. Esta vez es de descontento |
La Puerta del Sol anima el espíritu estos días |
El hecho es que mis pies me han llevado, sin tener conciencia de ello, hasta la Plaza del Pilar. Estaba allí acampado el llamado Movimiento del 15 de Mayo. La escenografía era extraña para el mundo tal y como lo conocemos. Un micrófono solitario, rodeado de una plaza repleta de gente sentada por doquier. El sistema de funcionamiento es lo que más me ha sorprendido. Allí se levantaba cada cual, en el momento en el que quedaba libre el estrado, y comunicaba al auditorio el mensaje personal que quería. No había consignas preparadas, mensajes únicos ni organizaciones de ningún tipo. He visto personas indignadas (perdón por el guiño facilón) con los canales del sistema. Eso era lo único que les unía: la evidencia de que el modelo representativo actual no funciona. Hay unas interferencias que se deben reparar, y no en base a una regeneración moral de los poderosos, que en eso ya pincharon los optimistas como los socialistas utópicos o los decimonónicos regeneracionistas. El hombre siempre vuelve a sus derroteros. La codicia, el miedo a enfrentarse al monstruo del capitalismo, la despreocupación por los asuntos ajenos son los valores imperantes en el mundo de la representación pública. Invertir el proceso de degradación sólo puede hacerse desde un punto de partida nuevo. Necesitamos una legislación clara que impida los abusos que nos avocan a la indiferencia política y al descrédito institucional. Estos son algunos de los mensajes, insisto, particulares que he podido escuchar.
1- Un sistema electoral que manipula las matemáticas no es la mejor referencia democrática de la que partir. Favoreciendo el bipartidismo, a los partidos nacionales con fuerte implantación o a los pequeños nacionalistas a modo de feudos se llega a la conclusión de que ninguna novedad puede llegar a tener presencia real en el mundo político.
2. Es un grave error el hecho de que la representación política se deba llevar necesariamente a cabo a través de los partidos políticos, que además, con premeditación reciben una financiación de acuerdo a sus resultados electorales pasados. Se impide, de este modo el surgimiento de ninguna otra organización, así como la posibilidad de elegir representantes ajenos al mundo partidista.
Joaquín Costa. La buena voluntad y... |
Conde de Saint Simon. ... el cambio de moralidad, no sirvieron en el pasado |
3. El sistema político caduco ignora, salvo en campaña electoral, todas las aportaciones que a la sociedad han ofrecido los llamados nuevos movimientos sociales desde la mitad del siglo XX. Las organizaciones ecologistas, feministas, antibelicistas, las ONG´s con finalidad de cooperación internacional, educación social, defensa de los Derechos Humanos, convivencia… viven hoy literalmente en el ostracismo para nuestros representantes. Por suerte, su presencia en la sociedad civil es tal que el desajuste acaba por desvelarse. Y parece que ha llegado el momento de integrar a los ciudadanos y sus organizaciones y acciones espontáneas en la política real.
4. El diálogo social se lleva por derroteros fantasiosos y alejados de las preocupaciones de la gente. Sindicatos que apenas representan a nadie; extremadamente dependientes de sus hermanos mayores, los partidos; nutridos generosamente por los fondos estatales y funcionando únicamente como empresas de transmisión de información y agencias de trabajo temporal, por no referirnos a sus ingresos como empresas de formación laboral. Éstos son los que se sientan frente a una patronal que se dedica a lo que se tiene que dedicar, a defender un sistema que siga protegiendo la explotación y los resultados empresariales insultantemente abultados. Ellos se lo coman y ellos se lo beban, pero no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo. La fantasmagoría se destapa y convierte a sus protagonistas en caricaturas. No son los nuestros. Ellos no.
Stephane Hessel. Juventud octogenária |
José Luis Sampedro. Lecciones de vida y arrojo |
5. Hay una mentira que se busca convertir en verdad a puro de repetirla. La abstención política es fruto de la despreocupación o la ignorancia. Y una leche. Existimos los absentistas responsables. Sabemos lo que hacemos cuando en cada cita electoral nos paseamos por delante del colegio electoral, metemos la nariz por la entrada, y salimos corriendo con nauseas agrias. Ignorar el hecho de que una parte cada vez mayor de la sociedad ejerce el derecho a la abstención consciente y punitiva es un error tan grande como el hecho de que los votantes lo son por convencimiento. No sólo estamos los que no votamos por falta de fe en el sistema, sino que una mayoría de los que acuden fieles a la cita, lo hacen a la contra. El voto del miedo, del menos malo. Ese es el panorama real electoral por estos lares. Descreídos en el exterior del sistema y temerosos en el interior. Si no es el momento de apretar las tuercas al poderoso, no lo será nunca.
Y por todo lo dicho hasta aquí y debido a una patología clínica que padezco desde que era pequeñito, quiero rendir un sentido homenaje a la gente con la que he pasado la tarde. No contarán con mi presencia en sus actos. No me manifestaré por su lucha. Y esto parece una contradicción después de lo escrito hasta aquí, pero es mi patología, el pesimismo innato la que provoca la imposibilidad total de pertenecer a ningún grupo, organización o movimiento. Pero lo que si que puedo es simpatizar con un grito sincero, indignado y lleno de conciencia política. Se infectará, no soy un inocente. El monstruo se los tragará como una galletita, no soy un ignorante. Pero mientras el grito perdure el la Plaza del Pilar tendrán mi apoyo, y como lo único que creo que hago bien en este mundo es crear sabores que nos acerquen a la felicidad, hoy trabajo por ellos. Para todos los indignados del 15 de Mayo, este cocktail para brindar por la victoria, esa utópica victoria. Amunt, amunt, que dicen nuestros queridos vecinos. Salut, charolastras.
José Saramago. Éste no faltaría a la cita |
Me uno a ese brindis.
ResponderEliminarSALUD!!!!!!!
ResponderEliminarMama de Lennon
No me gustan las ostras. Pero nada, nada. Aún sí, por supuesto, me uno al brindis. Aunque viendo la foto de ayer de Rudi en toditas las portadas no sé si lo usaremos mejor para olvidar los sinsabores que se nos avecinan.
ResponderEliminarAmunt!